Fundación Ciudad Literaria

"Pero los rezos, en el recuerdo, se acaban luego. Y en lugar de los rezos aparece, como la imagen definitiva, la silueta de la hermosa Salomé abriendo al fin la puerta de esa pieza oscura donde vive, en un block de departamentos ubicado dos cuadras hacia adentro del Paradero Veinte de la Gran Avenida, adonde la ha llevado silenciosamente para que no queden más dudas de las cosas que le están pasando, y todo se le confunda más en estos, los meses y momentos más extraños de su vida".