Fundación Ciudad Literaria

Las tanquetas de Carabineros que protegían la Moneda se han retirado, la guardia se ha escabullido dejando sus armas y máscaras antigases, los cocineros y mozos de la Marina se han hecho humo. La presencia militar en La Moneda se acaba cuando el Presidente desahucia a los edecanes diciéndoles, con la mímica correspondiente, que el último tiro de esta batalla se lo dará "¡así!", bajo la barbilla hacia arriba. El Presidente y sus acompañantes han quedado librados a sus fuerzas precarias... Allende organiza la protección de las ventanas de arriba, revisa las defensas del patio de invierno, inspecciona la enfermería del subterráneo, sitúa a sus hombres. En cada lugar da una orden y para cada quien tiene una palabra o una mirada solidaria.